Picture credit score: Mark J. Rebilas-USA TODAY Sports activities

Traducido por Pepe Latorre

Te sabes las estadísticas. Un promedio de .197, 215 ponches y 47 jonrones. Y 0 de 2 en intentos de bases robadas. El 54% de sus apariciones en el plato se resolvieron con uno de los three true outcomes. Ha acumulado 67 hits de extrabase frente a 48 sencillos.  Sólo un 0.7 de rWAR, lo mismo que su compañero menos reconocido Cristian Pache. Solo 1.4 de fWAR, igual que su compañero menos reconocido Johan Rojas. Al WARP le gusta un poco más y se va hasta el 2.5. Y la razón de generar pocas victorias son un guante del exterior izquierdo que generó -7.3 de DRP, -21 de DRS, -10 de UZR y -19 de OAA. Acumuló estas estadísticas jugando solo el 60% de las entradas defensivas de Filadelfia.

Pero no estoy aquí para elogiar a Kyle Schwarber. Tampoco para hundirlo. Sólo vine a descubrirlo.

Más en concreto, ¿alguna vez habíamos tenido un conjunto de habilidades tan extrañas en un tipo que fue principalmente (en 108 de sus 160 juegos como titular) un primer bate? Él no es Rickey Henderson. Él no es Ichiro Suzuki. ¿Qué es exactamente?

Este es del tipo de preguntas cuya respuesta es más fácil de encontrar gracias a Stathead de Baseball-Reference. Todos los datos que usamos en el artículo han sido extraídos de su Participant Batting Break up Finder. Únicamente mostraré datos de los juegos en los que Schwarber abrió.

Comencemos con el promedio de bateo. Durante la temporada common ha habido 1.258 peloteros que han sido primer bate en al menos 100 ocasiones en una única temporada de la MLB. Aquí están los 10 promedios de bateo más bajos de la historia.

(En caso de que te lo estés preguntando el más alto es Ichiro, .377 en 150 juegos en 2004).

Algunos de estos jugadores se merecen sus propios artículos. Goat Anderson, por ejemplo, nació con el nombre de Edward John Anderson y jugó un año en las Mayores. Lo hizo para unos Pirates que acumularon un récord de 91-63 y que utilizaron a Anderson en el exterior izquierdo (86 ocasiones), en el central (24) y la segunda (4) … ¿Y todo esto para disfrutar de su .206/.343/.225 en la alineación?

Pero me estoy yendo por las ramas. Los tres primeros son un campocorto de la segunda period de la pelota muerta, un jardinero de las primera period de la pelota muerta y nuestro chico, que conectó 34 jonrones y remolcó 77 como primer bate. Ten en cuenta también que dije en el primer párrafo que Schwarber tenía un promedio de .197, pero bateó .205 como primer bate. Eso significa que bateó .177 cuando fue segundo, tercero, cuarto o quinto.

Un dato curioso: de los 32 primeros bateadores (mínimo 100 juegos iniciados) con los promedios de bateo más bajos, el Kyle Schwarber de 2022 y el Kyle Schwarber de 2023 se combinan para conectar tantos bambinazos como los otros 30 juntos.

¿No habíamos superado ya lo del promedio de bateo? Lo hemos hecho. El porcentaje de alcanzar base de .345 de Schwarber como primer bate está en puesto 761 entre los 1.258 primeros bateadores habituales, y es muy related al .340 de promedio que la MLB ha tenido en 2023. Pero la pregunta que el jurado tiene que responder es si su temporada es extraña. Por promedio de bateo, ciertamente lo es.

¿Qué decir sobre los ponches? Ni siquiera llega al high 10.

Pero todos en esta lista abrieron más juegos que Schwarber. Si nos fijamos en el porcentaje de ponches sube en la lista.

Si ajustamos esto Schwarber podría no liderar el grupo. Así que no lo hagamos.

¿Y si miramos los jonrones? Una vez más, ni siquiera entre los 10 primeros.

El padre de Barry nació medio siglo antes de su tiempo.

Una vez más, Schwarber está condicionado en esto por una relativa falta de tiempo como primer bate. Aquí está el high 10 en frecuencia de jonrones.

Si obviamos la temporada atípica de Anderson y la bola dopada de 2019, Schwarber probablemente lideraría la lista.

No robar bases desde el puesto de primer bate no carece de precedentes. Organicé esta lista teniendo en cuenta sencillos + bases por bolas + golpeado por el lanzador + alcanzado por error, lo que no es ni de lejos un sustituto perfecto para las oportunidades de bases robadas, pero servirá para ilustrar esto.

Y no, Schwarber no es el único al que también han pillado dos veces. Todos menos Hernández (cero veces atrapado robando base) y Rose y Díaz (una vez cada uno) fueron atrapados más que él.

Pero los three true outcomes de Schwarber son insuperables.

Schwarber es el primer primer bate en la historia cuyos defensores no tuvieron que moverse durante más de la mitad de sus apariciones en el plato.

Y luego están los sencillos. Y Schwarber, sorprendentemente, destaca.

En 2004 Ichiro conectó 217 sencillos. Es el récord desde el puesto de primer bate. Le siguen los 203 de Ichiro en 2007, sus 191 en 2001 y sus 186 en 2006. Kyle Schwarber, en dos temporadas combinadas fuera de la posición de primer bate, está apenas a un tercio del camino hacia el récord de un año para sencillos de primer bate.

Entonces, ¿fue la temporada 2023 de Schwarber la más extraña jamás firmada por un primer bate? Le daría un “sí” calificado. Tuvo el porcentaje más alto de ponches y three true outcomes, y la proporción más baja de sencillos, en la historia de la MLB para los primeros bates habituales. Tuvo el tercer promedio de bateo más bajo y la tercera tasa de jonrones más alta. Si lo pones todo junto, es una temporada extremadamente atípica.

Pero si observas estas tablas notaras que, aunque los datos se remontan a 1901, los líderes se agrupan en el siglo XXI, muchos de ellos en los últimos años. El papel del primer bate ha cambiado. El modelo de Ichiro (dar un sencillo, avanzar una base y esperar que uno de tus compañeros de equipo te impulse) está siendo reemplazado por jugadores como Acuña, Betts, Marcus Semien y Schwarber: bateadores de poder y con habilidad para alcanzar base, una habilidad particularmente útil con un DH common.

Por eso creo que es prudente ver a Schwarber como un unicornio con fecha de caducidad. Su conjunto de habilidades es único en comparación con las medidas contemporáneas. Pero también lo fue el de Bobby Bonds hace 50 años (y cabe señalar que Bonds robó bases). Con el tiempo, más primeros bates recibieron boletos, se poncharon y conectaron jonrones. La combinación de habilidades de Bonds se volvió común.

No habíamos visto antes a un primer bate como Schwarber, pero probablemente lo haremos mucho en el futuro.